
Desde hace décadas se presenta el problema de la mala disposición de las llantas de autos desechadas. En las calles de muchas ciudades las vemos apiladas y parece algo normal, pero en realidad además de afectar a la salud por ser un foco peligroso de contaminación y cultivo de mosquitos que propagan enfermedades, invaden el espacio público.
Las llantas en desuso arrojadas a la calle, son tantas, que incluso se toman como parte del paisaje. Han existido algunos hallazgos de depósitos gigantes de este desecho -incluso uno que se pudo observar desde el espacio por medio de la herramienta Google maps- y a pesar de múltiples campañas, aún falta mucho para lograr el máximo compromiso tanto de las empresas que reciben este desecho, como de usuarios que los arrojan en vertederos, o las queman para sacar el cobre de los residuos.
Según datos de la OMS (organización mundial de la salud), se producen 1,7 millones de muertes infantiles anuales como resultado de la contaminación ambiental, entre la que está el humo de la quema de llantas.
DIGESA, Dirección General de Salud Ambiental del Perú, que afirma que, “si un neumático se encuentra en llamas desprende micropartículas de aceites no quemados que al ser inhaladas no volverán a ser expulsadas, provocando terribles consecuencias en la salud de las personas”.
Pero, ¿de qué forma nuestros países han abordado este complejo problema ambiental y de salud pública?
Afortunadamente, en Chile, Colombia y Argentina hay algunas empresas que han adquirido el compromiso de ay6udar en la solución de este problema, dando incentivos a los emprendedores que trabajen en la solución, utilizando estas llantas en la elaboración de materas, fruteros, sillas, mesas, columpios, camas para animales, etc.
Fundes (red de soluciones empresariales de Colombia), dictaminó que el núcleo del problema debe manejarse con un adecuado punto de acopio y aislamiento destinado al reciclaje de llantas.
La Secretaria Distrital de Movilidad de Bogotá informó que, desde el 2014 realiza un programa llamado “Llantas usadas en el lugar indicado” que habilita cerca de 100 puntos de acopio de llantas, con material de sensibilización a la ciudadanía sobre la disposición correcta de llantas en desuso, a la vez que motiva a 60% de los importadores y fabricantes de llantas a ser parte de un programa de posconsumo.
Como aporte a la solución de esta problemática, la empresa Gicome de Colombia, elabora pisos empleando llantas en desuso. El gerente Luis Germán Giraldo explico a la revisa dinero que “la empresa está dedicada a convertir las llantas viejas en pisos nuevos y añadió que han logrado darle color al caucho. Una buena parte de estas llantas, antes quemadas para sacarles el acero, ya se pueden transformar en baldosas, topellantas y bolardos.
En Argentina la empresa Xinca, elabora tenis a partir de neumáticos y residuos textiles de los que aporta el medio ambiente.
En chile, la empresa Polambiente, catalogada como una de las mas innovadoras en materias de reciclaje en América latina, procesa alrededor de 8.000 neumáticos cada año, por medio de un proceso donde se tritura la llanta, posteriormente se separan caucho acero y tela y emplean el componente principal de la llanta que es el caucho para fabricar aplicaciones o implementos deportivos.
Todas las medidas anteriores son muy importantes, pero es necesaria la participación ciudadana activa y la concientización global para que se pueda abordar la problemática desde el origen mismo, y que cada persona se responsabilice por el destino final de estos residuos tan nocivos. De todos depende mejorar nuestro entorno para un mejor vivir.
Redacción: Lucía Fernández – Vivir con sabiduría. Uno
Música: Chris Fernández