Un amenazador informe enviado por un ‘experto’, pone a la libertad religiosa en riesgo por la agenda LGTBI de la ONU, además de promover a los grupos homosexuales y transexuales.
Aún más, el polémico informe dirigido a los gobiernos pide acciones coercitivas contra los dirigentes y organizaciones religiosas, que incluyen amenazas y castigos si no cumplen con los nocivos lineamientos de la minoría LGTBI.
Las obligaciones para las religiones
El 21 de junio, el Consejo de Derechos Humanos de ONU analizaría la escandalosa propuesta que obligaría a las iglesias a casar personas del mismo sexo, y a imponer, por ley, quién tiene “derecho” a la absolución o la comunión, en el caso de los sacramentos católicos.
Además, se prohibiría a los sacerdotes y ministros ayudar a los homosexuales que buscan asistencia.
El informe llega incluso a pedir a los gobiernos que desestabilicen las religiones desde el interior apoyando a las facciones pro-LGBT que existen dentro de las diversas denominaciones religiosas.
Asimismo, establece que si las religiones enseñan que el comportamiento homosexual es un pecado o que el sexo es una realidad biológica inmutable, violan los derechos humanos.
También “niega que los profesionales de la salud puedan oponerse, por motivos religiosos, a realizar abortos o tratamientos y cirugías de transición de género, por ejemplo, ablaciones, incluso en niños”.
Una estrategia corrosiva
Las organizaciones internacionales como la ONU, que no son democráticas ni buscan el bien común, imponen una estrategia que impulsa sus propios objetivos a nivel internacional y, poco a poco, su agenda se infiltra en los gobiernos de todo el mundo como políticas obligatorias.
Para ello, camufla sus verdaderos y desviados propósitos con un lenguaje ‘acaramelado’ que hace creer a los pueblos que ‘es por su bien’, y cuando las poblaciones se dan cuenta, ya es demasiado tarde, porque sus derechos ya están corroídos y fuera de control.
La libertad religiosa en riesgo por la agenda LGTBI de la ONU
Las disposiciones que sean aprobadas por la Comisión de los Derechos Humanos son causa de alarma en los medios religiosos, porque la libertad religiosa está en riesgo por la agenda LGTBI de la ONU.
Por su parte, el abogado español, Ignacio Arsuaga Rato, presidente de la asociación católica HazteOir.org y de CitizenGO impulsa una solicitud de firmas bajo el lema: “Protege la libertad religiosa de la agenda LGTB de la ONU”, que en pocos días cuenta con más de 220.000.
Esta campaña es una acción concreta en defensa de la libertad religiosa, de los valores que tradicionalmente custodian y comparten las tradiciones espirituales, y presenta una forma accesible de apoyo a una causa tan importante.
En este contexto, Jack Fonseca, de Campaign Life Coalition, considera que la ONU es una organización anticristiana que busca destruir el cristianismo y la libertad individual.
Asimismo, argumenta que el verdadero objetivo de la ideología LGBT es socavar las democracias y lograr una dictadura global. Con las disposiciones del informe se sentaría un precedente peligroso para otras formas de tiranía.
Son tiempos difíciles los que se atraviesan actualmente, y demandan de una posición recta de parte de las personas que aprecian los valores tradicionales, entre ellos la familia y su entorno. Toda acción lícita en defensa de ellos es urgente y necesaria.
Escrito por José Hermosa para VCS Radio.net.
Imagen de portada: (Toma de YouTube/Español).
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