Uno de los crímenes impunes que más duele a millones de argentinos es la muerte de bebés en el vientre materno por el aborto. El ahora precandidato a la presidencia, Javier Milei lo combatirá.
Aunque el aborto terminó legalizándose por obra de las multinacionales que impulsan la ideología de género, y con la complicidad de cientos de activistas que salieron a escandalizar haciéndolo pasar como un ‘derecho reproductivo’, el privar de la vida a tantos seres humanos sigue siendo un asesinato.
La muerte de bebés en el vientre materno
Milei, al considerar una de las justificaciones que se usan para normalizar el aborto, dijo a su interlocutora abortista: “¿Frente al delito de la violación a vos te da derecho a cometer el asesinato del chico que está dentro del vientre de la madre?”. Si fuera así, equivaldría a compensar un delito con otro delito.
Peor aún, cuando se sabe que los bebés en gestación también sufren de una manera difícil de describir en palabras, pero el creador del siguiente gráfico acertó al plasmarlo.
El candidato argentino que arrasó en las elecciones primarias, preguntó en una entrevista: “¿Cómo puede ser un derecho ganado poder matar a otros seres humanos?”, mientras se declaraba partidario del movimiento “Pañuelo Celeste”, que defiende la vida desde la concepción, de acuerdo con El Cronista.
Cómo acabar con el aborto
Aunque las madres pueden dar muerte a sus bebés hasta la semana 14 de vida, en Argentina sin ser penalizadas, con base en una ley, Milei anunció que, si llega a la presidencia, lanzaría un plebiscito para que la gente opine si quiere esa ley. Si los votantes rechazan la norma, se eliminaría.
Construir sobre principios morales
Para Milei no se trata solo de un ‘anzuelo’ para pescar votos, sino que alude a construir en la sociedad sobre principios morales y correctos para evitar resultados perjudiciales. Incluso mencionó la destrucción de Sodoma y Gomorra como el resultado de contrariar esos principios básicos para el bienestar humano.
Por otro lado, Milei no es el único líder latinoamericano que busca proteger a las familias de las pérdidas de vidas por el aborto.
Santiago Peña, el joven economista de ideas conservadoras que recién asumió la presidencia de Paraguay también se opone al aborto y rechaza el matrimonio igualitario y la ideología de género.
La agenda de Peña no puede ser más clara al declarar: “Defiendo la familia en su composición tradicional: mamá, papá e hijos”. Incluso rechazó un ‘auxilio’ de la Unión Europea de 38 millones de euros para infiltrar con ‘lenguaje inclusivo’ a los niños del país a través de sistema educativo.
Por lo visto, empiezan a soplar buenos vientos en Latinoamérica, tanto para la democracia continental como para la protección de las familias.
Aunque las campañas para asesinar bebés en el vientre materno insensibilizan a muchas personas, esto no significa que la vida deje de ser sagrada, y de que nadie pueda considerarse con derecho a terminarla. Se hace imperativo detener el crimen de las vidas perdidas por el aborto.
Escrito por José Hermosa para VCS Radio.net
(Toma de pantalla: YouTube/La Nación)
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