5 minutos de lectura. Petro utilizaría movilizaciones sociales para presionar el alcance de sus objetivos.
Esta experiencia con un gobierno de izquierda no es fácil para los colombianos. La expectativa crece mientras su presidente, Gustavo Petro, sigue señalando el camino por el que insiste en conducirlos.
Tras varios fracasos al intentar cambiar radicalmente sistemas e instituciones que han funcionado durante décadas, Petro va mostrando cada vez más explícitamente que está dispuesto a imponer sus ideas, aunque “el remedio sea peor que la enfermedad”, para usar un dicho regional.
Así, en su discurso del 1º de mayo, dio un paso más allá de la moderación que estuvo tratando de demostrar, y arrinconó a su electorado contra la pared, enfrentándolo a la disyuntiva de “Reformas o revolución”, contraria a la democracia que los colombianos cultivan desde hace más de 200 años.
“El intento de coartar las reformas pueden llevar a una revolución”, expresó Petro, frase que coincide con su trayectoria de guerrillero y con la campaña de demostraciones violentas perpetradas por el grupo de ‘primera línea’ al que acudió para hacerse al poder. La trayectoria parece clara.
Este derrotero causa desasosiego en una sociedad que sufrió durante más de 70 años la sangrienta tormenta desatada por las FARC, y otros grupos violentos, que aún siguen usando las armas a las que unen un polémico poder político en el Congreso.
Para el exvicepresidente, Germán Vargas Lleras: “De ahora en adelante solo veremos posturas intransigentes frente a los proyectos, cero concertaciones y mucha presión de la calle, como amenaza el presidente”.
Por su parte, la vicepresidente, Francia Márquez, parece hacerle ‘coro’ a Petro, ya que, desde Cali, el mismo día alabó con ‘vivas’ a los miembros de la ‘primera línea’.
Lamentablemente, el país en medio de su desconcierto tiende a radicalizarse también, como se aprecia en el mensaje de la internauta, María Inés Vallejo Mejía: “Si Dr. Vargas Lleras, es muy grave, ya nos lanzó la alarma de guerra, pero el Pueblo todos estamos hartos de la Violencia y Agresión Política contra nosotros, quitando nuestros derechos a una vida digna. Quieren Guerra pues Guerra estamos dispuestos a todo, a defender nuestra Patria”.
El “cambio” que prometió Petro a los colombianos durante su campaña electoral no manifiesta avances positivos, hasta ahora solo se nota una escalada del guion violento aplicado por los izquierdistas defraudados.
El estilo de la narrativa de Petro podría resultar casual para la mayoría desprevenida, pero no deja de ser frío y calculador. No oculta que además de imponer sus objetivos a cualquier costo, también busca ‘atornillarse’ en el poder, al típico estilo de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro.
En otra ocasión, Petro manifestó: “… trabajar de noche también implica duplicar el periodo presidencial, o sea que eso equivale a una reelección…”, esta sería otra de las piezas de rompecabezas que iría armando a lo largo de su mandato y que preocupa a la nación que intenta dirigir.
Escrito por José Hermosa para VCS Radio.net.
Imagen de portada: Izda.: El presidente de Colombia, Gustavo Petro. Dcha.: La primera dama, Verónica Alcocer. (Toma de pantalla: YouTube/El Tiempo).
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