
Persecución contra los practicantes de Falun Dafa
Si bien es de esperar que un Estado persiga a los infractores de la ley, no es concebible que enfile toda su maquinaria para aplastar a un movimiento espiritual milenario, como ocurre con la persecución contra los practicantes de Falun Dafa, apolíticos por completo.
No obstante, esta es la cruda realidad que sufren los millones de personas que buscan su elevación interior siguiendo las recomendaciones de Falun Dafa, una disciplina que se basa en los principios universales de Verdad, Compasión, Tolerancia.
Solo un régimen totalitario como el que subyuga a 1.400 millones de chinos podría cometer los crímenes más abyectos contra personas como estas, todo por la envidia y el miedo a que pudiesen arrebatarle el poder obtenido con violencia y mantenido por el terror.
La persecución contra los practicantes de Falun Dafa
Hace ya 24 años que el Partido Comunista de China (PCCh) declaró que erradicaría por completo a los seguidores de Falun Dafa. Sin que mediara ninguna advertencia o negociación los sometió a las horrorosas torturas que denunció el abogado canadiense especializado en derechos humanos, David Matas.
Entre las violaciones a sus derechos humanos básicos se cuentan arrestos ilegales, detenciones, torturas e incluso la muerte por sustracción forzada de órganos, tal como lo reseña el medio internacional Minghui.
Además, el régimen chino allana las casas de los miembros de esta tradición milenaria, roba las pensiones que se han ganado los mayores, y somete a la orfandad y al absoluto desamparo a los hijos menores de los encarcelados injustamente.
Una vez en prisión, las víctimas son torturadas inmisericordemente, las mujeres son violadas y vejadas de las maneras más inhumanas. También se les aplican drogas desconocidas que arruinan su salud física y mental.
En la mayoría de los casos se esclaviza a los practicantes de Falun Dafa a campos de concentración donde son obligados a realizar trabajos forzados durante jornadas extenuantes, y sin ninguna compensación por su labor.
Una lucha implacable
A pesar de destinar inmensas cantidades de dinero en esa persecución cruenta, el PCCh podría declarar su derrota, puesto que Falun Dafa se multiplica por todo el mundo, gracias a la efectividad y pureza de su método.
Sin embargo, el régimen chino no cesa de desacreditar esta disciplina, y obstaculizar el desarrollo de los proyectos iniciados por sus miembros.
Rechazo de esos crímenes del PCCh
La Comisión de los Estados Unidos sobre Libertad Religiosa Internacional (USCIRF, por la sigla en inglés), ha reconocido en varios de sus informes anuales la persecución del PCCh contra Falun Dafa, y su malvada extracción de órganos.
“Personalmente, me preocupa que algunas de las políticas aplicadas a otros grupos religiosos en China puedan ser la nueva realidad para los Hui y los practicantes de Falun Gong”, declaró la vicepresidente de la Comisión, Nury Turkel.
En el informe del 15 de mayo de este año, un alto funcionario del Departamento de Estado, enfatizó en que el régimen chino “… sigue siendo uno de los peores violadores de los derechos humanos y de la libertad religiosa del mundo”.
Nuestra conciencia no debe aceptar esos crímenes cruentos, la sociedad humana no debe aceptarlos y los seres divinos tampoco lo aceptarán.
No se pueden ocultar tantas violaciones contra los seguidores de Falun Dafa, cuyo único ‘delito’ es la búsqueda de la perfección interior a través de la meditación y la práctica de Verdad, Compasión, Tolerancia.
Escrito por José Hermosa para VCS Radio.net.
Imagen de portada: (Toma de YouTube/Español).
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