Tiempo de lectura 4 minutos. Habría censurado mensajes de muchos médicos y especialistas de la salud
Además de los millones de muertes causadas por el virus del Covid-19 que enlutaron al mundo, muchas personas siguen inquietas por el aparente encubrimiento de otros eventos relacionados con esta polémica epidemia.
Entre las reclamaciones que poco a poco surgen en estos días, aparecen las de la congresista estadounidense Nancy Mace, quien denuncia que Twitter censuró los mensajes de muchos médicos y especialistas de la salud que advirtieron sobre los efectos adversos producidos por la vacunas.
Mace destaca que los abogados de Twitter no estaban cualificados para censurar los datos reales suministrados por médicos educados en instituciones tales como Harvard y Stanford, tales como el Dr. Bhattacharya. No obstante, también agradece al actual propietario de esta red social, Elon Musk, por permitir que esta información saliera a la luz.
En este tipo de ‘complot’ involucra a las autoridades de su país, como los centros para el control de las enfermedades, CDC, el FBI, y personajes como el polémico Dr. Fauci, quienes desautorizaron toda información diferente a la que ellos mismo transmitían. Además, indujeron a Twitter a etiquetar esa información como engañosa.
Con esos lineamientos impedían que los estadounidenses se enteraran de que las personas disponían de la inmunidad natural, que hacía innecesaria la vacunación. Tampoco permitieron saber de los efectos destructivos de los encierros, y sus consecuencias nocivas para la salud mental.
La congresista misma comparte su experiencia al respecto, relata que tras el segundo ‘pinchazo’ adquirió asma, temblores en la mano izquierda y un dolor ocasional en el corazón para el que no encuentra explicación médica.
Asimismo, expresa en un video de su presentación ante una comisión del Congreso de EE. UU: “Me lamento mucho por haberme puesto el pinchazo, por los problemas de salud que hoy tengo y que pienso que jamás desaparecerán”.
Más aún, Mace hace énfasis en uno de sus tuits acerca de que: “Necesitamos investigar a los funcionarios del gobierno que presionaron para censurar a sus ciudadanos”.
Los mismos productores de vacunas presionaron a Twitter, en concreto, el laboratorio alemán, BioNTech, solicitó que censurara a los usuarios que exigieran vacunas genéricas de bajo coste. Asimismo, Biotechnology Innovation Organization (BIO) aportó 1.275.000 dólares a una campaña especial de moderación de contenidos en torno a la “desinformación” sobre el covid-19.
Por otro lado, hasta los grandes medios reconocieron la efectividad de la inmunidad natural, por su parte la NBC publicó el 16 de febrero: “La inmunidad adquirida tras una infección por Covid es tan protectora como la vacunación contra la enfermedad grave y la muerte, según un estudio”.
Todo este ‘complot’ en contra de la salud pública y en busca de intereses particulares, ha suscitado la sospecha generalizada de los usuarios, al grado de que muchos rechazan la aplicación de esos productos que aún se encuentran en su etapa experimental.
Un ejemplo de ese rechazo es el que se presenta en Suecia, donde se desecharon recientemente 8,5 millones de dosis, porque “la gente ya nos las quiere”. Su costo fue de 143 millones de dólares.
Escrito por José Hermosa para VCS Radio.net.
Locución, Ignacio Lo Bello
Imagen de portada: La congresista estadounidense, Nancy Mace, 25 de febrero de 2023. (Toma de pantalla: YouTube/Congresswoman Nancy Mace).