Como en los tiempos bíblicos de Moisés, en el centro de África, una inmensa nube “negra” de langostas africanas a una velocidad de hasta 120 kilómetros por hora se dirige hacia Arabia Saudita y Yemen dejando solo miseria, arrasa con cultivos y todo lo que encuentre a su paso.
“Un enjambre del tamaño de Roma puede comer suficiente comida en un día como todos [los habitantes] en Kenya”, dijo Keith Cressman, oficial superior de agricultura de la FAO, según Scientific American.
Por su parte, la FAO, hace el seguimiento al impacto causado por los enjambres compuestos por cerca de 360.000 millones de estos insectos.
Las plagas han causado daños por valor de varias decenas de millones de dólares en África Oriental, en una de las peores invasiones registradas en muchos años, y se calcula que afecta seriamente la vida de al menos una décima parte de la población mundial. (Fuente: Bles.com. Redacción de vivirconsabiduría.uno)
