Las palabras, Dios, Biblia, budismo, Cristo, y todo lo que sea religión o espiritualidad, ha sido prohibido como libros de texto para la educación escolar por el gobierno dictatorial chino.
Esto se debe a que recientemente Xi Jinping, el presidente de China, en las nuevas directrices para la educación nacional, fueron rotundamente prohibidos como textos de enseñanza en primaria y secundaria, todos los libros extranjeros en especial los libros sagrados o religiosos, y los que tengan filosofías que no estén aceptadas por el gobierno.
“Las últimas directivas gubernamentales exigen que los autores, editores y maestros promuevan el ‘espíritu del pensamiento de Xi Jinping’ en todos los libros de texto, desde la escuela primaria hasta la secundaria … las directrices estipulan que todos los textos deben estar sujetos a revisión política por parte de expertos en marxismo tradicional Cultura china y valores revolucionarios… Los libros de texto y otros materiales de aula se suspenderán si hay “problemas con la dirección política y la orientación de valores del contenido del libro de texto”, según Asia News .
Xi Jinping declaró en el año 2016 que el socialismo y el marxismo tienen que ser incluidos dentro de la educación superior del país, y así progresivamente, más tarde fue imponiendo la eliminación palabras como Cristo, Biblia y Dios, en los textos de los niños de las escuelas primarias, así que todo libro escrito por extranjeros debe ser revisado para reducir su influencia en las mentes de los jóvenes.
“Limitar el acceso a libros de texto extranjeros es una forma de mantener la unidad ideológica desde el nivel primario de educación hacia arriba… El sistema sabe que el conocimiento es su némesis, por lo que tiene que monopolizar el derecho a definir el conocimiento para seguir existiendo… La lección que tomó de Hong Kong fue que, si no puede obtener el monopolio de la conciencia, entonces no tendrá seguridad política”, dijo Sulaiman Gu, PhD. candidato de la Universidad de Georgia, dijo a Radio Free Asia .
El Ministerio de Educación China, los libros extranjeros son para que el estudiante tenga una comprensión de otras culturas, pero el gobierno se reserva el derecho de revisarlos y las historias son alteradas para poder controlar la ideología comunista y elimina cualquier referencia religiosa.
En las universidades hay profesores que condenan ante la censura las obras clásicas que contienen palabras vinculadas con la religión y confiscan los textos. A modo de ejemplo, podemos citar “El Conde de Montecristo” de A. Dumas, “Resurrección” de León Tolstoi, “Notre-Dame de París”, de Víctor Hugo, etc. Todas estas operaciones responden a las directivas lanzadas por el presidente Xi Jinping a partir del 2015, cuando afirmó que, para existir en China, las religiones deben “sinizarse”, esto es, ser asimiladas a la cultura china y someterse al Partido Comunista. La “sinización” se obtiene exaltando el patriotismo nacionalista y despreciando las religiones “extranjeras”, como el cristianismo, según hispanidad.com.
“[El Partido] simplemente educa a los niños pequeños de una manera tan engañosa y los incita a estar en contra de Japón, Estados Unidos e incluso todo Occidente”, dijo un padre en un comentario en línea (Bitter Winter). Se hace que los escolares participen en obras de teatro en las que actúan como soldados comunistas.
(Fuente: Visiontimes.com e hispanidad.com)